19 de diciembre de 2022

Wait Till Helen Comes (Mary Downing Hahn)

He aquí otra de esas novelas que habría disfrutado muchísimo de adolescente. Me da pena no haberla descubierto entonces, pero puedo afirmar que a mis 45 años me lo he pasado fenomenal leyendo este breve libro sobre fantasmas, que se escribió en 1986 y es un clásico entre los adolescentes estadounidenses. 


Molly, de 12 años, y Michael, de 10, han tenido que lidiar con algunos cambios en su familia. Su madre, Jean, acaba de casarse de nuevo con Dave, que tiene una hija de 7 años, Heather. La dinámica de la nueva familia no es fácil. Heather se lleva fatal con sus nuevos hermanos y siempre busca refugiarse en su padre y llamar su atención. Molly y Michael opinan que la niña es insoportable y no duda en decir mentiras para ganarse los favores de los adultos y dejarlos a ellos en evidencia. Dave, por supuesto, siempre se pone de parte de su hija y, para intentar suavizar las cosas con su marido, Jean a menudo se pone también de parte de la pequeña Heather, lo que deja en los hermanos una gran sensación de injusticia.

Por si eso fuera poco, la familia se muda desde Baltimore a un pueblecito, o más bien una iglesia restaurada en medio del campo que no tiene ni vecinos en kilómetros a la redonda. Lo que es más: junto a la casa, para su sorpresa, hay un cementerio, y una de las tumbas llamará la atención de la pequeña Heather de una forma que, como pronto veremos, no es muy normal...

Este libro lo tiene todo: un fantasma que realmente llega a dar miedo (y más para ser un libro infantil-juvenil), un lago de aguas turbias, un cementerio antiguo con una tumba olvidada y unos personajes totalmente realistas con los que se sufre hasta el final. De hecho, la dinámica entre los personajes es lo que más me ha gustado. Jean es pintora y Dave es ceramista; la idea al mudarse a esa casa en el campo es que ambos tengan espacio para trabajar en sus respectivos talleres. Pero la idea también es que, mientras ellos trabajan, los niños campen a sus anchas por los campos, el arroyo, el cementerio y un caserón en ruinas que hay no muy lejos, junto al lago. Y, a ser posible, que no molesten mucho. Además mientras Michael desaparece en busca de insectos para aumentar su colección, a Molly le encargan que cuide a Heather, pero como se llevan tan mal ninguna de las dos está contenta con este arreglo. Para colmo, cuando Heather se escapa por el bosque siempre culpan a Molly, porque claro, ahora es su responsabilidad... Esos padres hacen tantos dislates a lo largo del libro que dan ganas de llamar a los servicios sociales...

Así las cosas, Heather, que cada vez es más insoportable, descubre una tumba en el cementerio un poco apartada de las demás. Es de una niña que, como Heather, tiene 7 años y además tiene sus mismas iniciales. Heather piensa que no es casual y acude allí con insistencia hasta que el fantasma de la niña se materializa ante ella: se llama Helen y va a ayudar a su nueva amiguita a vengarse de Molly y Michael, que tan malos son con ella... «Wait till Helen comes!!», les chilla Heather a Molly y Michael una y otra vez...

No digo más, pero el libro no deja un momento de respiro y te lleva hasta un final que me ha parecido tremendo. Es una pena que no esté traducido a español, pero si os atrevéis con el inglés es una lectura ideal para estas noches largas de invierno: os lo leeréis en una o dos tardes y es la novela de fantasmas perfecta. El público objetivo creo que son niños de 10 años en adelante, pero yo casi diría que mejor a partir de 13-14 años, porque hay algunos pasajes un poco oscuros hacia el final. De todas formas, ya veis que los adultos lo podemos disfrutar igualmente. 

Si ya conocíais a Mary Downing Hahn, ¿me recomendáis algún otro libro de ella?


18 de diciembre de 2022

Dagfrid (Agnès Mathieu-Daudé y Olivier Tallec)

A Dagfrid hay muchas cosas que no le gustan, empezando por su nombre. La verdad es que la vida de una niña vikinga no es nada divertida: se peinan las trenzas enrolladas como caracolas sobre las orejas, se ponen vestidos demasiado largos y secan el pescado. Por si fuera poco, pescado es lo único que comen. Pero es que encima las niñas ni siquiera tienen derecho a navegar y a descubrir mundo. Bueno, hasta ahora. Porque Dagfrid ya se ha hartado del pescado seco.

CONOCE A DAGFRID. LA IRREVERENTE, INCONFORMISTA Y DIVERTIDA VIKINGA QUE NO DUDA EN DESAFIAR LAS CONVENCIONES SOCIALES.




Este libro me pareció muy simpático cuando lo vi en la última edición de Masa Crítica Infantiles de Babelio y tuve la suerte de que me tocara. Os cuento mis impresiones.



Dagfrid, una niña vikinga es un librito de 48 páginas pensado para niños de más de 6 años; es una historia sencilla, divertida y con la que aprenderán un poco más sobre los vikingos y sobre todo lo que aporta abrirse a otras culturas.

¿Y de qué va este libro? Pues, muy resumido, nuestra protagonista es obviamente Dagfrid, una niña vikinga que está harta de serlo: solo tienen pescado para comer, deben llevar vestidos superlargos con los que no pueden correr a su antojo y se recogen las trenzas en dos rodetes. Dagfrid se rebela un poco a su manera, pues cuando aprende a coser se hace unos pantalones para ir más cómoda y lleva las trenzas sueltas en lugar de recogidas en caracolas, que no le gustan nada. Pero eso no es suficiente para el carácter fuerte e intrépido de Dagfrid, así que un día decide pedirle ayuda a su hermano para zarpar, poner rumbo a alta mar y descubrir algún lugar interesante.



Y así nuestra protagonista llega a una isla habitada por chicas como ella con sus propias particularidades; por ejemplo, solo tienen cordero para comer en vez de pescado. Pero claro, también están hartas de comer solo cordero, así que al final Dagfrid les enseña a pescar y a construir un barco, y las chicas le enseñan a Dagfrid a tricotar la lana del cordero y a criar corderitos para alimentarse. Toda una aventura para la pequeña Dagfrid, que vuelve a su isla con un montón de cosas nuevas que contarle a su pueblo.

Una historia simpática que replantea los roles de género en una sociedad poco igualitaria, en la que Dagfrid se atreve a salir del camino que había marcado para ella y labrarse su propia aventura. De la mano de Dagfrid, los niños se darán cuenta de que no hay motivo para que no vivan como ellos quieren, tomen sus decisiones y sigan su propio camino.

Lo publica la editorial Flamboyant y lo ha traducido del francés Diego de los Santos. Ah, y por si os gusta y os quedáis con ganas de más, este año que viene publicarán la siguiente aventura de Dagfrid, la niña vikinga.

Una historia muy simpática y con la longitud ideal para leer en el cuento de buenas noches. Por si andáis buscando ideas...