Las primeras tres cuartas partes de esta breve novela son justo lo que esperaba encontrar: una evocadora historia ambientada en los paisajes de Cornualles, en los que las inclemencias del tiempo juegan un papel importante (a menudo los personajes se ven azotados por vientos o aguaceros, para después disfrutar de un sol cegador). Destacan algunos personajes entrañables, sobre todo Phoebe, la artista bohemia de sesenta años que vive en una pequeña casita junto a la costa y siempre tiene las puertas abiertas para acoger a los suyos. Pero Phoebe se ha roto un brazo, así que su sobrina Prue acude para pasar unos días con ella y ayudarla en las tareas cotidianas. Estando allí, Prue conoce a Daniel, un misterioso artista amigo de Phoebe que ha estado ausente durante diez años. La afinidad de Daniel y Prue es inmediata, pero ella ha dejado a un noviete en Londres y él parece un artista atormentado con pájaros en la cabeza. ¿Podrá surgir algo entre ellos? Y en medio de todo esto surge un personaje inesperado: Charlotte, una niña de diez años con aire desvalido a quien la vida no está tratando muy bien. ¿Cómo encaja ella en todo esto?
(Ojo, pequeños spoilers.)
Como digo, las primeras tres cuartas partes de la novela me gustaron mucho por la capacidad que tiene Pilcher de describir paisajes y situaciones. Me encantan las moradas en las que viven sus protagonistas: la típica casita inglesa un poco vieja y desvencijada, pero llena de toques personales que contribuyen a darle calidez. Y me gusta también que suele haber muchas escenas en las que los protagonistas se reúnen en torno a un reconfortante té con scones. Otra cosa que creo que Pilcher hace muy bien es describir personajes, y sin embargo en esta novela ha fallado un poco. Para mi gusto Daniel es solo un bosquejo, no se desarrolla su carácter lo suficiente, por lo que no llegué a sentir mucha simpatía por él. Daniel resulta ser una persona poco confiable, que huye de sus problemas. Y, cuando la novela ya termina, su carácter cambia por completo para poder ofrecernos el final de cuento de hadas, y claro, a mí como lectora eso no me ha cuadrado para nada.
Por otra parte, la chica, Prue, tampoco es un personaje muy memorable, aunque creo que habría tenido un pase si la trama hubiera estado un poco más desarrollada y mejor resuelta.
Por último, todo el tema de Charlotte, la niña de 10 años, me ha parecido un poco cuestionable, da ganas de llamar a los servicios sociales, y sin embargo parece que se resuelve con una amigable charla en un despacho. Ahí se nota un poco que hace cuarenta años que se escribió este libro...
Resumiendo, este libro es en esencia Rosamunde Pilcher, es decir, una lectura que te atrapa desde la primera página, muy agradable de leer, de esos libros que invitan a sentarte en el sofá con un té y una manta y leer durante horas. Sin embargo, el final no está bien resuelto para mi gusto. Me ha hecho añorar a esos escritores valientes que no temen rematar un libro sin el esperado final feliz, consiguiendo una lectura no menos satisfactoria por ello.
Lo que más me echa para atrás es ese fallo a la hora de describir a los personajes. NO creo que me anime esta vez.
ResponderEliminarBesotes!!!
Sí, quizá no es su novela más acertada, pero de todas formas es un buen libro si se busca una lectura plácida para evadirse, muy necesaria en los tiempos que corren.
Eliminar¡Besotes!
YO no he leído nada de a la autora pero ahora me vendría muy bien un libro suyo, aunque sea con la pega que le pones, algo así sencillito, bonito, que no te haga pensar mucho... Estaría genial. Gracias por la reseña. Besos
ResponderEliminarPues entonces este libro te gustaría. Yo le he puesto esa pega porque soy un poco tiquismiquis, jeje, pero en realidad es un libro que se lee rápido y muy bien.
Eliminar¡Besotes!
Hace años releí todos los libros que tenía de la autora, y te puedo asegurar que casi todos son iguales. Quitando "Círculo de amigos", el resto son igualitos, y eh, eso que la autora me tenía enamorada desde hacía años (imagínate desde los 90's, jajajaja).
ResponderEliminarUn besazo!
Jejejeje, de todas formas está bien saber que un determinado autor es un valor seguro, ¿no? De vez en cuando apetece una historia amable, en un pintoresco pueblecito inglés, donde todo va fluyendo y que te deja una agradable sensación al final.
EliminarDe todas formas "Círculo de amigos" es de Maeve Binchy, ¿no? Por cierto, un libro que releí no hace mucho y que ME CHIFLA. :D
Besotes.